lunes, 18 de agosto de 2008

Fragmento.

No lo escuchó entrar, se sobresaltó al sentir su mano fría y tersa en su hombro. Giró lentamente para encontrarse con esos ojos, tan brillantes, tan perfectamente enmarcados por esas gruesas y largas pestañas, su piel blanca, sus labios rojos.
Sintió que rodeaba su cintura con los brazos, la presión contra su cuerpo.
No dijo nada, de todas formas no importaba, él ya lo sabía…
Acercó su boca al cuello, penetrando con sus colmillos la joven piel. Un gemido, sintió correr la sangre por su boca, apretó más su cuerpo contra el de ella, sintió su sabor, su calor, su respiración agitada…

Fragmento de hace mucho tiempo.

miércoles, 13 de agosto de 2008

Time

Es la pérdida que no soporto.
Desaparecen lentamente, se desvanecen y uno no comprende.
Alguna vez comprenderé? Comprederemos?
Un día uno piensa y luego ya no está, el recuerdo no es nítido y el tiempo juega a destruir.
Caemos en su manipulación, qué es nuestra culpa!
Estoy perdida y en el futuro seré una nueva yo.

sábado, 9 de agosto de 2008

martes, 5 de agosto de 2008

Un día

Madrugada frente a la pc. Quizás me sirva para repensar mi día.
Bonito, sí.
Me levante algo tarde, relajada.
Sostuve a mi perrita en brazos malcriándola, dejándola dormir a sus anchas sobre mi falda y enroscada en la forma en que ella quería.
Luego me escapé con mamá al supermercado, hacía mucho tiempo que no íbamos juntas. Dimos trecientas vueltas para comprar poco y nada. De todas formas compramos algo para mí, y dos regalos para el día del NIÑO para disfrutar en familia -los regalos ya los abrimos -cierto, díganlo: ya no se los considerarían niños-.
Comí en casa, después me puse a leer Homo Faber -nuevamente- para comenzar a hacer mi monografía, creo que ya sé el tema... pero uno siempre cambia cuando empieza a escribir, ¿no?.
Después jugué con mamá, papá -poco tiempo porque se ofendió porque supuestamente "hacíamos trampa"- y mi hermano al Crucigrama. Conclusión, soy desastrosa para los juegos de mesa, ni con palabras puedo ganar en nada.
Después llegó mi cuñada, Juan, mi primo y salimos al cine.
Vimos Kun Fu Panda -creo que así se escribe-, luego Burguer -cené a las 12 de la noche, muy extraño en mí-. Luego cada uno a su casa.

Acá estoy, escribiendo esto. Extrañándolo, añorándolo, queriéndolo.
Necesitándolo.
Quizás no sepa disfrutar de los momentos en que estamos juntos y te necesito cuando nos alejamos... quiero otra siesta como la del lunes, quiero otro abrazo como el del lunes, quiero otros días, otros meses, otros años junto a vos.